miércoles, 15 de febrero de 2012

a Humberto y Juana

Han pasado ya más de 9 años de tu partida y aún te extrañamos. Todavía te recuerdo cuando yo era apenas un niño. Cuando me hablabas y cuando nos íbamos con mamá-todos los sábados y domingos religiosamente-a verte a ti y a tu esposa.

Aun tu recuerdo esta presente en los corazones y mentes de cada una de las personas que formamos parte de tu familia y de tu vida. Todavía me acuerdo que-como escribí en una ocasión también aquí en el blog-tu risa era idéntica a la del chompiras, a pesar de que mi mamá no lo entendiera y que dijera que no.

Gracias a ti, tengo esa afición de ver mucho los programas de Chespirito. Mamá; ¿de donde crees que tengo tanto recuerdo nostálgico cuando veo o escucho un programa de él? Gracias a ti cada programa que veo me trasporta a aquella época donde la vida era tranquila y feliz.

Mi mamá aún te extraña y recuerda, yo sigo recordándote en cada uno de los videos que veo y a veces tengo tantas ganas de darte un abrazo, pero no puedo…ya no estas con nosotros y te extrañamos como no tienes idea.

Dama, excepcional. Señora de aquellas, todavía recuerdo cuando de la manera más formal y solemne te despediste de tu esposo aquella tarde de agosto. Después de aquella partida tu vida no era la misma, se te notaba que algo te faltaba y era él. Siempre recordare cuando me contabas aquella anécdota una y otra vez y yo escuchando atentamente cada una de tus palabras.

Muchas veces te he soñado y en todas siempre con tu mismo traje morado. La última vez, te vi enojada. Pero creo que era por que necesitabas decirme algo. Tu recuerdo también esta latente en cada uno de nosotros, aquí todos-sin excepción- te extrañamos y te recordamos. Cada palabra que decías siempre la escuchaba con atención completa.

Aún me parece verte, caminado por cada uno de los rincones de tu hogar, aquel que se construyó con mucha ilusión y que ahora es testigo de cada una de las fiestas, reuniones y cosas que se vivieron allí.

Cuando te fuiste me puse a imaginar como fue la primera vez que llegaron a aquella casa, cuanta ilusión de formar una familia y cuantos sueños de los que vivieron allí, pero que ahora se desvanecen ya que aquellos esposos ya no estarán presentes para recordar las cosas que vivieron juntos.

A estas dos personas especiales en mi vida, mis abuelitos Don José Humberto Zavaleta Lujan, natural de Salpo hijo de Doña Teófila Lujan Otiniano y de Don Adán Zavaleta y Acosta y a Doña Juana Rosa Vargas Alcántara de Zavaleta, natural de Cultambo en la provincia de Pacasmayo hija de Don Toribio Vargas y de Doña Zoila Alcántara. A ustedes abuelitos que aun extraño con todas mis fuerzas-y no solo yo, sino sus hijos-a ustedes un pequeño pero significativo homenaje para recordarlos para siempre.

GRACIAS, INFINITAS GRACIAS POR SER SU NIETO Y POR DARME UNA EXELENTE MADRE! A USTEDES LAS GRACIAS INFINITAS POR SER PARTE DE SU FAMILIA.

sábado, 11 de febrero de 2012

Gira Mágica la que me toco correr...este 14


Hoy estoy sentado en la terraza de mi casa, escuchando algunas viejas canciones del recuerdo, mirando la tímida luna que ha salido esta noche y llenándome de polvo luego de la última lluvia.

Viendo esta luna rojiza me pongo a ver la fecha de mi móvil: 11 de febrero de 2012, y la idea que mueve este fugaz mes se me viene a la mente: San Valentín. ¿Hace cuanto no paso un San Valentín como debe ser?

Conversando una noche-con una chica por el internet-me dijo que ella no creía en esta festividad, pero que estaba esperando la oportunidad en que lo pueda pasar con el chico de sus sueños. Curioso yo le pregunté: ¿hasta ahora no lo encuentras? Ella se limitó a responderme de manera negativa, al mismo tiempo que me daba a entender que también se había desilusionado de ese sentimiento llamado, amor.

Creo que esta sociedad, vive en esa situación. De cada amistad con la que conversaba siempre-tanto hombres como mujeres-me decían lo mismo: “no, lo que pasa es que no encuentro a esa persona”

No se si alucinamos o algo por el estilo, pero buscamos la perfección a sabiendas de que nadie es perfecto en el mundo y el día en que lo fuéramos, se acabará el interés en la vida. En fin, haciendo algo de memoria la última ocasión en la que pase un San Valentín con una chica fue…creo que nunca. Salvo aquella ocasión en la que me toco trabajar un 14 de febrero y la pase con uno de mis grandes amores al cual no cambio por nada en este mundo: el periodismo. Y sobre todo el deportivo.

Si alguien me pregunta: ¿planes para este 14? ¿Que le puedo responder? Si les engaño, les mentiría a mi mismo porque ni yo sé que hacer. Es más, para colmo de males en el país lo han decretado feriado. Y con lo que me “gustan” los feriados. O sea aburrición total.

A veces, me pongo a pensar: “… que habría sido de mi si hubiese tomado el tren. Aquel vagón del amor que solo pasa una vez…” canción de Víctor Manuel que a veces escucho. Digo, si tan solo encontraría a esa persona que complete mi ser-y no me vengan a decir que no, que espérate la vida te tiene preparado algo bueno para ti, porque ese menudo rollo lo escucho desde hace mucho-aquella mitad que colme de felicidad mi ser y que sea motivo de cariño constante y de amor puro y sincero y sobre todo fiel. (Porque personas que son fieles quedamos pocos en este mundo)

Hoy a puertas de esta fecha, no me decido aún si cometer un cupidicido u olvidarme de ese personaje que hasta ahora no me visita. Mientras tanto, creo que seguiré cantándole al aire o a la luna que es tan hermosa esta noche y que me inspira a que se lean las palabras que están viendo.

Me gustó mucho aquella canción (cara luna de Bacilos) que ahora estoy empezando a comprender, porque al ver esta luna me hace soñar e imaginar tantas cosas…

Como estará la palaya esta noche. “…esta noche solo quiero tocar tu canción que todos sepan que me muero por voz, que tengo ganas de gritar, que nada podrá ya parar este amor, este amor…” Me gusta mucho ese tema de Raúl Porchetto, pero creo que no me quedaré bailando en la vereda…si esta vez-por más que lo desee y quiera-no lo haré.